Si alguna vez has buscado imágenes para ilustrar tus textos, webs o blogs, sin duda ya habrás visto las palabras «libres de derechos». Se refiere a un servicio ofrecido por profesionales, incluidos los bancos de imágenes, y corresponde a contenidos libres de derechos (también puede aplicarse a música, textos, vídeos, dibujos, fotografías, etc.). Pero todo esto no está exento de limitaciones. Por ello, es fundamental saber utilizar correctamente estos contenidos para no cometer errores.
Especificidades de las imágenes libres de derechos
Esta mención corresponde a la autorización para utilizar una imagen en determinadas condiciones. En efecto, aunque estén libres de derechos, no podemos utilizar estas imágenes como queramos y hacer lo que queramos con ellas. Estas restricciones pueden referirse al uso de las imágenes, pero también a su distribución o modificación (mejora, obra derivada, etc.).
Es importante saber que, aunque la imagen sea gratuita, hay que citar al autor. Para cada imagen existen también condiciones específicas de uso. Éstas se indican en licencias específicas (o copyleft) que es imprescindible tener en cuenta. Éstas se refieren simplemente a lo que se puede o no se puede hacer con la imagen en cuestión.
Cuando un autor somete su creación a una licencia libre de derechos, autoriza a utilizarla libremente (o no, pero en este caso sólo se paga una vez, sea cual sea la duración del uso) en determinadas condiciones. Es importante saber que existen diferentes tipos de licencias libres de derechos. Es posible utilizar obras bajo una licencia CC o Creative Common. También en este caso, la licencia CC (la más extendida) puede tener diferentes obligaciones. Así, es posible utilizar una imagen de forma no comercial o comercial, tener o no derecho a modificarla, o mantener la misma licencia después de modificarla.
Los principios básicos para utilizar correctamente las imágenes libres de derechos
Lo primero que debes saber para un uso óptimo de este tipo de imágenes es que es imprescindible respetar los derechos de autor, pero también los derechos de imagen. Si no se menciona al autor, se considera que has cometido plagio, lo que está penado por la ley.
En el marco de una imagen bajo licencia GNU, es posible hacer lo que se quiera con la imagen (uso y modificación), pero esto no significa que sea libre. Las normas francesas sobre el uso de imágenes son estrictas. Si desea utilizar imágenes con muchas menos restricciones, puede visitar sitios europeos que ofrecen imágenes gratuitas sin restricciones específicas.
Cómo utilizar una imagen libre de derechos
Lo primero que hay que comprobar es el coste de la imagen. A continuación, tendrás que comprobar las condiciones que concede la licencia de la imagen que has elegido.
Si desea utilizar la imagen con fines comerciales, también deberá comprobar el tipo de licencia. El uso comercial puede estar totalmente autorizado. En segundo lugar, el contenido puede no estar autorizado y, por tanto, utilizarse con fines comerciales. En tercer lugar, el contenido puede estar restringido al uso editorial.
En el primer caso, significa que ha obtenido permiso para utilizar la imagen con fines comerciales. En el segundo caso, si las personas, edificios o animales no son identificables, no necesitará solicitar ninguna otra autorización. En caso contrario, deberá obtener permiso para utilizar la imagen. En el tercer caso, estas imágenes no pueden utilizarse con fines comerciales.
Si desea utilizar una imagen para ilustrar una entrada de blog, es importante saber que libre de derechos no es en absoluto sinónimo de gratuito y sin restricciones. ¿Desea descargar una imagen de un coche deportivo? ¿Viene con una licencia libre de derechos? Está bien, pero ¿está autorizada su utilización en su blog por la marca del coche? Según la legislación francesa, esto es esencial. Como ves, la utilización de una imagen, aunque sea libre de derechos, impone ciertas reglas que no debes pasar por alto si no quieres meterte en problemas (procedimientos judiciales).
¿Qué ocurre con las imágenes creadas mediante inteligencia artificial?
Cada vez oímos hablar más de la IA y entonces se plantea la cuestión de bajo qué licencia se puede explotar. En general, en Francia, la imagen creada por IA tiene un derecho de autor que va a la persona que creó el software que permitió la creación. También puede haber excepciones. En este caso, la creación de la imagen se atribuye al cliente. A partir de ese momento, el cliente es libre de utilizar la imagen como considere oportuno. Dependiendo de la plataforma, los derechos de autor se transfieren automáticamente a la persona que generó la imagen. Así que no dudes en preguntar antes de utilizar la imagen.